Representación
heráldica ecuestre del Rey de Aragón Alfonso V el Magnánimo, con
el señal real en sobreveste y gualdrapas del caballo. (Armorial
ecuestre del Toison d'Or. París, Bibliothèque de l’Arsénal, ms.
4790, f. 108r, miniatura n.º 228)
Alfonso
V de Aragón llamado el Magnánimo y el Sabio, entre 1.416 y 1.458
fue rey de Aragón, Valencia (Alfonso III), Mallorca (Alfonso I),
Sicilia (Alfonso I), Cerdeña (Alfonso II) y conde de Barcelona
(Alfons IV); y entre 1.442-1.458 rey de Nápoles (Alfonso I).
Era
el hijo primogénito del regente de Castilla Fernando de Antequera
(posteriormente rey de Aragón con el nombre de Fernando I), y de la
condesa Leonor de Alburquerque. Pertenecía, por tanto, a la Casa de
Aragón por ser nieto de Leonor de Aragón (ya que la dignidad real
aragonesa podía transmitirse por línea femenina), y pertenecía al
linaje Trastámara por ser nieto de Juan I de Castilla.
El
28 de Junio de 1.412 se convierte en heredero al trono de la Corona
de Aragón cuando su padre es proclamado rey tras el Compromiso de
Caspe.
El
12 de Junio de 1.415, en la Catedral de Valencia, contrae matrimonio
con su prima la infanta María hija de Enrique III de Castilla y de
Catalina de Lancáster. Y el 2 de abril de 1.416, tras el
fallecimiento de su padre le sucede como rey de Aragón y de los
demás reinos de los que era titular.
Alfonso
V puede considerarse como un genuino príncipe del Renacimiento ya
que desarrolló un importante mecenazgo cultural y literario que el
valió el sobrenombre de “el Sabio” y que convertiría a Nápoles
en el foco principal de la entrada del humanismo renacentista en el
ámbito de la Corona de Aragón. Protegió a humanistas destacados,
como Lorenzo Valla, Giovanni Pontano o Antonio Beccadelli. Fruto de
este mecenazgo fue un círculo de poetas de cancionero cuya obra
recoge el Cancionero de Stúñiga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario