3/10/21

Nagas Sumerios

Diosa Serpiente (Naga), amamantando un bebé (terracota de Ur del IV milenio).

En el templo de Inanna en Uruk (Mesopotamia) la escritura se hacía en forma de pictogramas; las mujeres eran escribas, poetas, escolares y autoras de textos religiosos. 
Algunos autores creen que Mesopotamia era originariamente un matriarcado y que gradualmente se hizo patriarcado con la emergencia de las ciudades estado. Durante ese proceso, las diosas serpiente de la antigüedad se convirtieron en temidas como manifestaciones del poder femenino y del misterio. En la “Epica de Gilgamesh” se cuenta la leyenda del héroe y de la serpiente que le roba la hierba de la inmortalidad.

En la tradición ofítica a la diosa de la Luna Cibeles (diosa de la Madre Tierra, adorada en Anatolia desde el neolítico y equivalente de Gea, de la Rea minoica y la Magna Mater romana se la suele representar ofreciéndole una copa a una serpiente.
En Canaan y Palestina, la serpiente enrollada en un palo fue adorada como dios de la curación y también como representación de la diosa Tierra. A la diosa de los cananitas, Astarté, también se le relaciona con serpientes. Otra diosa serpiente era Kadi, una deidad asirio-babilónica adorada en Der que controlaba la mortalidad, se representaba como una serpiente con senos humanos.
A los dioses de la muerte se les representaba con serpientes subiéndoles por los hombros. También la serpientes representaba al dios de la oscuridad, Tiamat.

Los Nagas, misteriosos dioses serpiente que moraron en la India en épocas remotas, fueron llamados sarpa o serpientes. El término que se encuentra en la mitología hindú, tiene antecedentes sumerios.
Hay un antiguo documento cristiano que se refiere no solamente a los dioses serpiente sino también a los dioses del panteón sumerio. Como tal, este himno cristiano tiene probablemente sus orígenes en un rezo sumerio. Llamado el Rezo de José, forma parte de los Papiros Mágicos, de origen griego. Data del segundo siglo después de Cristo.

El himno comienza con la alabanza: “Padre de los patriarcas, padre de todas las cosas, padre de todas los poderes del cosmos, creador de todo, creador de los ángeles y los arcángeles, el creador de los nombres de la redención, Yo te invoco ".

Después de algunas invocaciones más, el rezo continúa sorprendentemente:
" Tú que te sientas sobre la Sagrada Montaña del Sinaí, tú que te sientas sobre el mar, tú que te sientas sobre los dioses serpiente, el dios que se sienta sobre el dios del sol."
Además de la referencia tácita a los dioses serpiente, también se refiere al dios que se sienta sobre el mar. Aunque la línea está incompleta, parece ser una referencia velada al dios sumerio del agua Enki ya su palacio de agua o Abzu.
El referido Dios Sol es probablemente Utu/Shamash, mientras que el dios del Monte Sinaí es Ishkur/Adad. Así, la invocación parece ser dirigida a Enlil (Zeus), el dios predominante del panteón cananita que más adelante fue conocido como “El” en el Antiguo Testamento. Además, los nombres de la redención son probablemente las Tablas del Destino o los Nombres Divinos, que parecen estar basados en los Sumerios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario