AMENOFIS
IV. Neferjeperura Amenhotep, Neferjeperura Ajenatón o Amenhotep IV.
Décimo
rey de la dinastía XVIII, hijo y sucesor de Amenhotep III y de la
reina Tiya, la cual profesaba el culto a los astros. Pronto se apartó
del camino de prudencia que al principio había seguido, y empezando
por cambiar su nombre que era en algún modo compuesto de Amón por
el de Koumaten, que significa esplendor del disco solar, acabó por
prohibir la práctica de la antigua religión y ordenar el culto a
los astros en sus estados. Entonces sus súbditos se levantaron
contra él y tuvo que salir de Tebas y trasladar la capital a
El-Amarna, donde levantó grandes monumentos e hizo diversas
construcciones.
Tell
el-Amarna es el nombre árabe de una región egipcia situada en la
ribera oriental del río Nilo, célebre por ser el enclave donde se
edificó la ciudad de Ajetatón (o Akhetatón, El Horizonte de Atón)
a mediados del siglo XIV a.C., la nueva capital de Egipto.
La
capital fue diseñada con un trazado geométrico ortogonal
(hipodámico), esculpiéndose quince grandes estelas para marcar los
límites. En su interior, Akenatón ordenó construir majestuosos
edificios, tales como:
-El
gran templo a Atón, caracterizado por su construcción al aire
libre (sin techo) para permitir la entrada de luz solar. Poseía dos
sectores importantes: "La casa del jubileo" con un pilon y
sala hipóstila de 16 columnas, y "El descubrimiento de Atón"
con seis patios a cielo abierto consecutivos en los cuales se
situaban 365 mesas de ofrendas. El templo fue construido en
proporción alargada con pequeños bloques de piedra (talatat) y los
mejores materiales.
-Los
palacios reales, que se construyeron para Akenatón, la reina
Nefertiti y las princesas reales. Uno de ellos tenía la Ventana de
las apariciones, terraza desde la cual la familia real se mostraba a
sus súbditos y era de gran importancia simbólica. También se
podía encontrar el palacio del norte edificado para la reina como
un mundo en miniatura conformado por grandes jardines y estanques
donde había diversos animales.
-Edificios
administrativos como el edificio de los archivos que contenía las
"Tablillas de el-Amarna o Cartas de Amarna", la
correspondencia real en su mayor parte diplomática entre la
administración egipcia y no solo con sus semejantes en Canaán,
Amurru, Mittani y Babilonia, también con estados vasallos en Siria.
Tablillas cuneiformes, escritas en su mayoría en acadio, lengua
diplomática internacional para este periodo. El archivo completo,
que también incluye correspondencia del reinado precedente, de
Amenhotep III, contenía más de trescientas cartas diplomáticas;
el resto es una miscelánea de materiales literarios o educativos.
Estas tablillas arrojaron mucha luz sobre las relaciones de Egipto
con Babilonia, Asiria, Mitani, los Hititas, Siria, Canaán y
Alashiya (Chipre). Son importantes para establecer tanto la historia
como la cronología del periodo. El periodo que abarca la
correspondencia comprende los reinados de Amenhotep III, Ajenatón,
Semenejkara, Tutankamón y probablemente Ay.
-Las
viviendas de los nobles, de planta rectangular que corrían por el
medio de la ciudad.
-Los
hipogeos (tumbas excavadas en la roca), situadas al norte y sur de
la ciudad. En estas se podían ver escenas de la vida diaria de la
antigua ciudad, como las apariciones públicas de la pareja real.
-Una
ciudad para los trabajadores de la necrópolis.
-Recientemente
se ha encontrado al sur de la ciudad el denominado Kom el-Nana. Se
trata de un recinto descubierto pero apenas hay trabajos acerca de
este emplazamiento.
Amenofis
IV había sido nombrado sumo sacerdote de Ra en Heliópolis y
coronado faraón en el templo de Amón en Karnac. Durante los
reinados de Amenofis III y Tutmosis IV, el clero de Amón ya había
sido desplazado por el de Ra y se había introducido el culto a Atón.
Ajenatón
o Akenatón instauró el culto a un dios único, Atón, representado
por el disco solar, del cual salían brazos que acababan en manos con
el signo Ank de la vida, siendo él único profeta del dios e
intermediario entre los hombres.
Se
ocupó más de las cuestiones religiosas que de la politica, y en sus
17 años de reinado se deterioró sensiblemente el imperio exterior
egipcio y todas las posesiones sirias se perdieron debido a las
conquistas hititas, periodo conocido como el "Cisma de Amarna".
Cuando el rey de Biblos, Rib-Adda fue asesinado, a pesar de que el
ejército egipcio acudió en su ayuda. Egipto perdió entonces sus
posesiones en el Próximo Oriente, y los hititas aliados con sus
vecinos Babilonios aprovecharon esta ocasión para llegar hasta las
mismas fronteras de Egipto.
En
algunas tumbas de los funcionarios de Akenatón se encontraron
fragmetos del Himno a Atón y su parecido con el Salmo bíblico 103
es sorprendente.
Dice
así:
Eres
tú quien hace que se desarrollen los gérmenes en las mujeres.
Tú quien crea la simiente en los hombres.
Tú quien da vida al hijo en las entrañas de su madre.
Tú quien le calma con lo que hace cesar el llanto.
Tú, la nodriza de aquel que está todavía en las entrañas.
Tú quien da incesantemente el aliento para vivificar a cada una de las criaturas.
Cuando sale la criatura de las entrañas para respirar, el día de su nacimiento,
le abres la boca de par en par, y le provees de todo lo que necesita.
Tú quien crea la simiente en los hombres.
Tú quien da vida al hijo en las entrañas de su madre.
Tú quien le calma con lo que hace cesar el llanto.
Tú, la nodriza de aquel que está todavía en las entrañas.
Tú quien da incesantemente el aliento para vivificar a cada una de las criaturas.
Cuando sale la criatura de las entrañas para respirar, el día de su nacimiento,
le abres la boca de par en par, y le provees de todo lo que necesita.
Fuente:
http://www.egiptomania.com/historia/
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